Hoy nos has dicho Adiós y te has llevado un trozo de cada uno, para siempre. Hoy nos has dejado tú, uno de "Los 5", el Rey de la Casa, después de casi 13 años de compañía, de fidelidad, risas. Hoy la casa se queda coja, incompleta, sin ladridos...
Han sido tantos los buenos momentos, las manías!, el cariño... Es tanto lo que podría decir que no se por donde empezar. No me salen las palabras. Sólo lágrimas. Y a veces, inevitablemente, una sonrisa... recordandote.
Tu ladrido, o apoyar tu cabeza sobre la rodilla de alguno, bastaba para modificar el mundo a tu antojo. "Baja del sofá que quiero subirme yo!", "Echate a un lao, y déjame hueco en la cama!", "Deja de fregar y juega conmigo!", "He terminado de comer, quiero mas!" - "No!!, esto no!, quiero de aquello!!", "Hazme cosquillitas!", "Sácame a la calle!"... Si habían ojos expresivos, eran los tuyos. Tu mirada bastaba. Tu meneo de orejas. La forma de tu hocico!!... los dientes hacia fuera, siempre eran vergüenza o mosqueo, cuando sabías que se hablaba de tí!.
¿Y lo que comías?, aquello no tenía fin!, de ahí la expresión "Tengo mas hambre que er Flappy en el Ramadán", entre otras. Así estabas!, que todas las visitas al veterinario acababan con "Deberían ustedes ponerlo a dieta!", y nada mas salir de ahí, mi padre respondía "Le voy a dar todo lo que me dé la gana!". Pocas veces se te llamaba Flappy... Mas bien eras "el gordo", "gordo-babas", "croqueta pelúa"...
Tenías una laaaaaaaarga lista de juguetes!, pero tus favoritos siempre han sido 'el erizo rojo', que a veces, era imposible quitarte de la boca, y el manojo de nudos de hilos de colores. Y aquí se van a quedar los dos!, para jugar con ellos, de vez en cuando!. Aunque nos tomen por locos! ^^
Jugar para tí, era sagrado, hasta cuando las patitas empezaban a fallarte!, no parabas!, eras un torbellino!. Y sieeeempre despues de comer, o ibamos a jugar contigo, o empezabas tu concierto particular en el salón!.
Y cuando no jugabas, te asomabas a la ventana para poner un poco de orden fuera, para imponer tus leyes!, y por supuesto, para que todo perro que osara pasar por tu territorio, se enterara de quién es el que manda en el barrio!.
Parece mentira que llegaras con solo 4 días a esta casa!, el 6 de Noviembre del 96, y la de cosas que se han vivido desde entonces!. Cabías en la palma de una mano!. Al principio eras tu y tu hermanita, vaya dos golfos!, con los ojos aún cerrados, andando sin poder evitar arrastrar los barrigones, con la cola intacta acabada en puntita blanca!, y con una gran mancha en el hocico que con el paso del tiempo, se fue haciendo mas pequeña hasta quedar a la altura del labio de abajo.
A los 40 días, se llevaron a tu hermana, y casi puedo adivinar lo que pensaste "Por fín, la cama pa' mi solo!". Te pasabas el día dormido!.
Tu primer juguete fue un muñequito que hacia ruido al apretar, de color naranja!, así te oímos gruñir por primera vez! ^^.
Lo que te gustaba la playa... bueno, mas bien beberte toooodo el agua del mar!. Y luego te pasabas un rato vomitando la espuma!. Y no aprendías la lección!.
En fín, no sé. Han sido casi 13 años, entrando en casa, y recibiendo tu bienvenida, moviendo el rabo, dando saltos, y trayendome juguetes. O saliendo, y despidiendome de tí. Despertandome y saludandote, o viniendo tu a despertarme a mí. Arropandote antes de dormir... Son muchas cosas con las que hay que empezar a acostumbrarse a no vivir. Por lo menos, estoy feliz de haber luchado hasta el final, de no habernos rendido aquel 3 de Septiembre, cuando te dieron menos de 5 dias de vida, y nos aconsejaban el sacrificio... Siempre nos negamos a llegar a eso. Aunque hayan sido mes y medio (y no 5 dias) impotentes, de subirte y bajarte en brazos, de estar a tu lado permanentemente, uno u otro, de darte los tratamientos, de no parar hasta hacerte comer... y al final, te has ido de la manera mas natural. Hasta para eso, has sido el mejor!. Eres un campeón!. Nunca te olvidaremos!. Has sido y eres muy grande!!. Te echaremos muchisimo de menos!. Gracias por todo!.
TE QUEREMOS FLAPPY, HASTA SIEMPRE!.
Han sido tantos los buenos momentos, las manías!, el cariño... Es tanto lo que podría decir que no se por donde empezar. No me salen las palabras. Sólo lágrimas. Y a veces, inevitablemente, una sonrisa... recordandote.
Tu ladrido, o apoyar tu cabeza sobre la rodilla de alguno, bastaba para modificar el mundo a tu antojo. "Baja del sofá que quiero subirme yo!", "Echate a un lao, y déjame hueco en la cama!", "Deja de fregar y juega conmigo!", "He terminado de comer, quiero mas!" - "No!!, esto no!, quiero de aquello!!", "Hazme cosquillitas!", "Sácame a la calle!"... Si habían ojos expresivos, eran los tuyos. Tu mirada bastaba. Tu meneo de orejas. La forma de tu hocico!!... los dientes hacia fuera, siempre eran vergüenza o mosqueo, cuando sabías que se hablaba de tí!.
¿Y lo que comías?, aquello no tenía fin!, de ahí la expresión "Tengo mas hambre que er Flappy en el Ramadán", entre otras. Así estabas!, que todas las visitas al veterinario acababan con "Deberían ustedes ponerlo a dieta!", y nada mas salir de ahí, mi padre respondía "Le voy a dar todo lo que me dé la gana!". Pocas veces se te llamaba Flappy... Mas bien eras "el gordo", "gordo-babas", "croqueta pelúa"...
Tenías una laaaaaaaarga lista de juguetes!, pero tus favoritos siempre han sido 'el erizo rojo', que a veces, era imposible quitarte de la boca, y el manojo de nudos de hilos de colores. Y aquí se van a quedar los dos!, para jugar con ellos, de vez en cuando!. Aunque nos tomen por locos! ^^
Jugar para tí, era sagrado, hasta cuando las patitas empezaban a fallarte!, no parabas!, eras un torbellino!. Y sieeeempre despues de comer, o ibamos a jugar contigo, o empezabas tu concierto particular en el salón!.
Y cuando no jugabas, te asomabas a la ventana para poner un poco de orden fuera, para imponer tus leyes!, y por supuesto, para que todo perro que osara pasar por tu territorio, se enterara de quién es el que manda en el barrio!.
Parece mentira que llegaras con solo 4 días a esta casa!, el 6 de Noviembre del 96, y la de cosas que se han vivido desde entonces!. Cabías en la palma de una mano!. Al principio eras tu y tu hermanita, vaya dos golfos!, con los ojos aún cerrados, andando sin poder evitar arrastrar los barrigones, con la cola intacta acabada en puntita blanca!, y con una gran mancha en el hocico que con el paso del tiempo, se fue haciendo mas pequeña hasta quedar a la altura del labio de abajo.
A los 40 días, se llevaron a tu hermana, y casi puedo adivinar lo que pensaste "Por fín, la cama pa' mi solo!". Te pasabas el día dormido!.
Tu primer juguete fue un muñequito que hacia ruido al apretar, de color naranja!, así te oímos gruñir por primera vez! ^^.
Lo que te gustaba la playa... bueno, mas bien beberte toooodo el agua del mar!. Y luego te pasabas un rato vomitando la espuma!. Y no aprendías la lección!.
En fín, no sé. Han sido casi 13 años, entrando en casa, y recibiendo tu bienvenida, moviendo el rabo, dando saltos, y trayendome juguetes. O saliendo, y despidiendome de tí. Despertandome y saludandote, o viniendo tu a despertarme a mí. Arropandote antes de dormir... Son muchas cosas con las que hay que empezar a acostumbrarse a no vivir. Por lo menos, estoy feliz de haber luchado hasta el final, de no habernos rendido aquel 3 de Septiembre, cuando te dieron menos de 5 dias de vida, y nos aconsejaban el sacrificio... Siempre nos negamos a llegar a eso. Aunque hayan sido mes y medio (y no 5 dias) impotentes, de subirte y bajarte en brazos, de estar a tu lado permanentemente, uno u otro, de darte los tratamientos, de no parar hasta hacerte comer... y al final, te has ido de la manera mas natural. Hasta para eso, has sido el mejor!. Eres un campeón!. Nunca te olvidaremos!. Has sido y eres muy grande!!. Te echaremos muchisimo de menos!. Gracias por todo!.
TE QUEREMOS FLAPPY, HASTA SIEMPRE!.
Hasta siempre, Flappy.
ResponderEliminarDesde luego que ha sabido luchar hasta el final.
Cuando quieras hablar, aquí me tienes, ya lo sabes.
Pobrecito, mi mas sentido pésame, tengo debilidad por los perros!!
ResponderEliminarAhh, cuanto lo lamento niña... hasta siempre Flappy.
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